POR ALMUDENA MARTÍNEZ-BORDIÚ | ACI Prensa
El Papa Francisco con agentes de la Seguridad. Foto: Vatican Media
Este jueves 3 de febrero, el Santo Padre recibió en el Palacio Apostólico a los dirigentes y personal de Seguridad Pública del Vaticano, a quienes agradeció la labor “delicada” que realizan sobre todo en época de pandemia.
Durante el encuentro, el Papa Francisco les manifestó su estima y aprecio y les agradeció la labor que realizan dentro del Vaticano sobre todo durante estos meses “marcados por la pandemia”.
“Han sabido adaptar su trabajo, combinando las normas sanitarias y orden público con las necesidades de los peregrinos”, aseguró el Papa.
El Pontífice también explicó que su labor es “considerable y delicada” y que facilita los actos espirituales y religiosos así como las visitas de los turistas a la Plaza de San Pedro.
“También les agradezco que su presencia es discreta y al mismo tiempo eficaz y se hace aún más fructífera con su colaboración con la Gendarmería Vaticana. Quiero animarles para que su servicio, a veces arduo, se sostenga siempre en su motivación fundamental: cuidar de las personas, proteger su dignidad y su seguridad”, afirmó el Papa.
El Santo Padre hizo referencia a la fiesta de la Presentación del Señor en el Templo, celebrada el pasado martes 2 de febrero y explicó que “el Evangelio relata el encuentro de María y José, jóvenes recién casados, con dos ancianos, Simeón y Ana. Diferentes generaciones e historias se encuentran, y en el centro está Jesús. Hace pensar que ustedes, con su trabajo, permiten que se produzcan muchos encuentros también aquí, donde el Señor está presente”.
Además, el Papa Francisco afirmó que su trabajo es una labor “preciosa”, ya que deben poner a la persona siempre en el centro, “como Dios nos trata a nosotros”, y recordó a continuación a todos aquellos que “han dado la vida en el servicio, también durante la pandemia”.
Por último, el Santo Padre comunicó a los presentes su voluntad de saludar a cada uno de pie, aunque el dolor de rodilla en ocasiones se lo impida. “Les pido que no se ofendan si en algún momento tengo que despedirme de ustedes sentado”, concluyó el Papa.
Fuente:www.aciprensa.com
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