Cardenal pide intercesión de mártires para que la fe de México “no se pierda”

POR DAVID RAMOS | ACI Prensa

Imagen referencial. Crédito: Yannik Pulver / Unsplash.

El Arzobispo Emérito de Guadalajara (México), Cardenal Juan Sandoval Íñiguez, pidió la intercesión de los mártires como el Beato Anacleto González Flores, para que la fe de los mexicanos “no se pierda”.

En un video mensaje compartido en las redes sociales de ArquiMedios, el semanario de la Arquidiócesis de Guadalajara, recordó que los mártires asesinados en la primera mitad del siglo XX, durante la persecución del gobierno mexicano contra la Iglesia Católica, “son nuestros modelos y son también nuestros intercesores en el Cielo”.

“Que pidan que la fe de este pueblo mexicano no se pierda, porque parece que las nuevas generaciones se enfrían, poco asisten ya a la iglesia”, dijo.


“Que los santos mártires que ofrecieron su vida por la patria sean los que intercedan para que la fe en Cristo Nuestro Señor, el único Salvador del mundo, no se pierda”, añadió.

El Cardenal Sandoval recordó al Beato Anacleto y a sus compañeros mártires, junto a los que fue beatificado el 20 de noviembre de 2005, en una ceremonia presidida por el Cardenal José Saraiva Martins, entonces prefecto de la Congregación para las Causas de los Santos.

En su video mensaje, el Cardenal Sandoval dijo que el 1 de abril la Iglesia recordó a los mártires Anacleto González Flores, José Dionisio Luis Padilla Gómez, y los hermanos Jorge Ramón y Ramón Vicente Vargas González.

Todos ellos fueron torturados y asesinados por tropas del Gobierno el 1 de abril de 1927.

Al día siguiente, los hermanos José Luciano Ezequiel y José Salvador Huerta Gutiérrez fueron aprisionados tras rendir homenaje al Beato Anacleto, hoy patrón de los laicos mexicanos, y sus compañeros mártires. Luego de ser torturados, fueron asesinados el 3 de abril, tras perdonar a sus verdugos y pedir “que nuestra sangre sirva para la salvación de muchos”.

El Cardenal Sandoval aseguró que los mártires mexicanos “son gloria de la Iglesia de México” y “son nuestros modelos en el amor a Cristo, la firmeza de la fe y modelos de virtudes cristianas, porque eran hombres, buenos, piadosos, de mucha devoción a la Eucaristía”.


Fuente:www.aciprensa.com

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