El P. Roger Landry encabeza una procesión eucarística por el campus de la Universidad de Columbia en la ciudad de Nueva York el 12 de noviembre de 2024. | Crédito: Marina Frattaroli / Cortesía.
Por Alyssa MurphyEl P. Roger Landry puede haber sido el primer capellán católico de la Universidad de Columbia en encabezar una procesión eucarística en el campus y, en medio de mayores medidas de seguridad, las puertas se abrieron nuevamente de par en par para dejar entrar la Presencia Real de Cristo.
Hace menos de seis meses que la Universidad de Columbia tuvo que cancelar las ceremonias de graduación debido a las protestas generalizadas en su interior. El P. Roger Landry recuerda bien los momentos angustiosos, y es por eso que la procesión eucarística que encabezó por todo el campus durante el fin de semana significó tanto para él.
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“Esta fue la cuarta procesión eucarística que realizamos en el campus desde que me convertí en capellán en 2022 y la primera desde las controversias de la primavera pasada. Fue un momento especial para traer al Príncipe de la Paz al campus de Columbia y pedirle que restablezca la paz en la que los estudiantes puedan florecer genuinamente”, manifestó el sacerdote al National Catholic Register.
El P. Landry explicó que la seguridad sigue siendo estricta en el campus, pero le conmovió la preocupación que mostró la universidad para permitir que la procesión se llevara a cabo con reverencia.
"Estábamos muy agradecidos de que Columbia no solo aceptara nuestra solicitud de consideraciones especiales (dándonos pulseras al comienzo de la procesión, para que no tuviéramos que pasar todos uno por uno, haciendo que nos revisaran las identificaciones en los puntos de control de seguridad para ingresar al campus), sino que incluso abriera las enormes puertas del campus para que pudiéramos pasar manteniendo un espíritu de oración", dijo el capellán católico y colaborador frecuente del Register.
El P. Roger Landry y una multitud de estudiantes participan en la procesión eucarística en la Universidad de Columbia el 10 de noviembre de 2024. Crédito: Cortesía.
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"Para mí, fue como el cumplimiento del Salmo 24: ‘Cuando las puertas levantaron sus cabezas para dar la bienvenida al Mesías y Señor entrante’".
Esta fue una procesión monumental para el capellán católico.
"Para mí, personalmente, esta procesión eucarística fue especial. Primero, porque es la última que encabezaré como capellán católico en Columbia, ya que me voy en Navidad para convertirme en el director nacional a tiempo completo de las Obras Misionales Pontificias. Fue una gran oportunidad para agradecer a Dios por todo lo que ha hecho por mí y por los estudiantes desde que comencé en 2022”, afirmó.
Esta procesión por todo el campus de Columbia también fue mucho más corta que la última del sacerdote católico. El P. Landry fue el único sacerdote que caminó todo el tramo de la Ruta Seton durante la Peregrinación Eucarística Nacional el verano pasado. Durante la procesión del campus, el presbítero llevó “a Jesús en la misma custodia que usamos este verano”.
La procesión de Columbia también contó con la participación de otros dos “peregrinos perpetuos”, por lo que fue una especie de reunión especial y una forma de invitar a otros.
“La música estuvo a cargo de Zoe Dongas y la maestra de ceremonias fue Marina Frattaroli, exalumna de Columbia, dos de los seis ‘peregrinos perpetuos’ que viajaron conmigo durante el verano. Así que fue un medio por el cual los estudiantes de Columbia pudieron participar un poco de los frutos de la Peregrinación Eucarística Nacional”.
Frattaroli también encontró la experiencia esclarecedora, según le dijo al Register:
“Fue especial para mí, como alguien que participó en la Peregrinación Eucarística Nacional este verano, ver el florecimiento del Renacimiento Eucarístico, verlo continuar más allá del Congreso en Indianápolis y fluir hacia las vidas, las vidas espirituales de la comunidad de la que soy parte”, afirmó.
El P. Roger Landry encabeza una procesión eucarística por una concurrida calle de Manhattan, frente a la Universidad de Columbia, el 10 de noviembre de 2024. Crédito: Cortesía.
Y no pasó desapercibido lo impactante que fue este evento, dado el cierre en curso con amenazas de protestas y violencia que aún persisten en el campus. "Fue muy conmovedor y simbólico que las puertas del campus, la caminata universitaria, estuvieran abiertas por primera vez en quién sabe cuántos meses, específicamente para esta procesión y específicamente para que Jesús pudiera pasar", compartió Frattaroli. “Para mí, lo veo como un anticipo de la victoria eterna de Cristo”.
Llevar a Jesús a las calles es una forma muy real de evangelizar a las masas, dijo el P. Landry, destacando cómo impacta en quienes participan en la procesión, así como en los transeúntes.
“Las procesiones eucarísticas ayudan a todos los católicos a aprender a compartir nuestra fe, que en última instancia consiste en llevar al Señor a los demás y ellos a Él. Cuando sacamos a Jesús de nuestras iglesias —al mundo que Él redime—, y damos testimonio de que estamos con Él y estamos tratando de seguirlo, entonces nos animamos a poder mencionarlo en las conversaciones y compartirlo como el tesoro que es”.
Continuó: “Me conmueve mucho ver cómo se conmueven los estudiantes al caminar con Jesús en el campus, pidiéndole que bendiga sus estudios, que bendiga a sus amigos y profesores, que sane el campus de sus diversas heridas autoinfligidas. Regresan envalentonados por la adoración ambulatoria que son las procesiones eucarísticas”.
"La procesión eucarística es una hermosa tradición en la fe católica", afirmó Frattaroli y agregó: "Creo que es importante como herramienta de evangelización porque hace lo que la Iglesia hace mejor, que es señalar al mundo hacia Jesús".
Y mientras el P. Landry se embarca en un nuevo viaje sirviendo con las Obras Misionales Pontificias, el humilde e inspirador sacerdote ha dejado una marca indeleble en al recién graduada en Derecho.
"Dicen que un solo carbón encendido puede encender toda la estufa y he visto de primera mano cómo el Padre Landry tiene ese efecto en muchos de los estudiantes de Columbia. Su hermosa Misa diaria, su predicación inspiradora y su minucioso programa RCIA han inspirado a tantos jóvenes católicos entusiastas aquí y han creado una verdadera cultura eucarística en el campus de Columbia", aseguró.
Frattaroli también señaló que el P. Roger Landry no sólo trajo el amor por los sacramentos al alumnado "y puso a disposición la adoración y la confesión todos los días antes de la Misa diaria", sino que también fue el capellán católico que trajo a Cristo al campus.
"Cuando llegó, también comenzó la práctica de la procesión eucarística y, hasta donde sabemos, trajo a Jesús por las puertas de Columbia por primera vez en la historia", destacó.
Traducido y adaptado por el equipo de ACI Prensa. Publicado originalmente en el National Catholic Register.
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Alyssa Murphy
Alyssa Murphy es la editora ejecutiva de activos digitales del National Catholic Register. Comenzó su carrera en las ondas de radio en San Francisco y ha trabajado en todas las facetas de los medios. A Alyssa le gusta escribir y cubrir historias que inspiran y animan
Credito:www.aciprensa.com
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