Papa Francisco. Crédito: Vatican Media.
Por Eduardo Berdejo
El Papa Francisco visitará del 31 de julio al 3 de agosto la República Democrática del Congo, país ubicado en la zona central de África y que sufre la violencia de grupos armados, uno de ellos vinculado al Estado Islámico.
La República Democrática del Congo fue una colonia de Bélgica entre 1908 y 1960. Ese año alcanzó su independencia a raíz de la política de las Naciones Unidas que puso fin a las últimas colonias.
Con una población mayoritariamente cristiana, la República Democrática del Congo, que entre 1971 y 1997 fue conocido como Zaire, tiene entre sus vecinos a la República del Congo y Sudán del Sur.
LAS MÁS LEÍDAS
1
2
3
4
5
Este viaje, que comprende también la visita a Sudán del Sur, había estado programado para julio del año pasado, pero el estado de salud del Papa Francisco obligó a posponerlo.
Para 2022, el viaje a la República Democrática del Congo incluía una visita al oriente del país, una zona convulsionada por grupos armados como las Fuerzas Democráticas Aliadas (ADF) –organización terrorista vinculada al Estado Islámico– y el Movimiento 23 de Marzo (M23).
La violencia en esta zona lo ha convertido en uno de los países con los mayores números de desplazados en el mundo, unos 5,6 millones de personas, de acuerdo a la Agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR).
MÁS EN VATICANO
En medio de esta situación, la Iglesia Católica trabaja para dar esperanza a la población, tal como señaló el P. Godefroid Mombula Alekiabo, misionero establecido en la capital Kinshasa.
Durante la conferencia “El viaje del Papa Francisco a la RDC y a Sudán del Sur: Un mensaje de unidad y reconciliación para dos países machacados por la violencia y el sufrimiento”, el sacerdote indicó que la Iglesia local está trabajando para llevar a Kinshasa grupos de desplazados y demás personas afectadas por la guerra.
En el evento, organizado el 16 de enero por Ayuda a la Iglesia que Sufre, el P. Mombula destacó el papel de la Iglesia Católica en la República Democrática del Congo en los campos de la educación y la salud.
“Sus escuelas han educado a más del 60% de los alumnos de primaria del país y a más del 40% de los de secundaria. La Iglesia posee y gestiona una extensa red de hospitales, escuelas y clínicas, así como muchos otros numerosos proyectos”, afirmó el sacerdote, que también es profesor y secretario académico de la Universidad de San Agustín, en Kinshasa.
Relación Iglesia-Estado
El P. Godefroid Mombula Alekiabo explicó que durante la colonia la Iglesia tenía buenas relaciones con el Estado. Sin embargo, los primeros sucesos después de la independencia hicieron que se convirtiera “en la voz institucional más crítica”.
Fuente:www.acoprensa.com
Comentarios