POR DAVID RAMOS | ACI Prensa
El Arzobispado de San Salvador (El Salvador) informó que su Arzobispo Emérito, Mons. Fernando Sáenz Lacalle, que fue confesor y director espiritual del mártir San Óscar Arnulfo Romero, falleció esta mañana a los 89 años.
A través de Twitter, el Arzobispado de San Salvador señaló que “esta mañana falleció Mons. Fernando Sáenz Lacalle, arzobispo emérito de San Salvador. Encomendamos su eterno descanso”.
Mons. Sáenz Lacalle nació el 16 de noviembre de 1932 en Cintruénigo (España). Se licenció en Ciencias Químicas en la Universidad de Zaragoza y luego estudió Filosofía y Teología en la Pontificia Universidad Lateranense en Roma.
Fue ordenado sacerdote a los 26 años, en 1959, incardinado en la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz, institución unida a la actual Prelatura del Opus Dei. En 1962 llegó a El Salvador.
En 1984 San Juan Pablo II lo nombró Obispo Auxiliar de Santa Ana (El Salvador). Para 1993 se convertiría en el administrador apostólico del Ordinariato Militar del país.
El 22 de abril de 1995, San Juan Pablo II lo nombró Arzobispo de San Salvador y recibió al Papa en su segunda visita a El Salvador, en 1996.
Durante su gobierno pastoral fue un claro defensor del derecho a la vida desde la concepción y se expresó en rechazo a los intentos de despenalizar el aborto en el país.
Mons. Fernando Sáenz Lacalle y San Óscar Romero
San Óscar Romero, asesinado por odio a la fe el 24 de marzo de 1980 en San Salvador, participaba con frecuencia en los encuentros de formación espiritual de la Sociedad Sacerdotal de la Santa Cruz.
Durante varios años, el santo salvadoreño recibió la dirección espiritual del P. Juan Aznar, también vinculado al Opus Dei. Cuando este tuvo que viajar a Costa Rica, el entonces P. Fernando Sáenz Lacalle asumió esa responsabilidad.
Mons. Sáenz Lacalle precisamente estuvo cerca de San Óscar Romero en sus últimas horas de vida. Desde la mañana del 24 de marzo, junto a un grupo de sacerdotes, tuvieron un espacio de formación dirigido por el sacerdote del Opus Dei, que previamente lo había recogido en auto de las oficinas del Arzobispado de San Salvador.
Entre los temas que se conversaron en esa ocasión, recordaría años más tarde Mons. Sáenz Lacalle, estuvieron los cristeros de México y el Beato Padre Agustín Pro.
El encuentro sacerdotal concluyó sobre las 3:00 p.m., y el entonces. P. Fernando Sáenz Lacalle lo llevó hasta el Hospital de la Divina Providencia, en cuya capilla sería asesinado poco después San Óscar Romero durante la celebración de la Misa.
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Fuente:www.aciprensa.com
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